Radio UNAM Podcast:Conciertos de Difusión cultural y OFUNAM

Serie: Conciertos de Difusión cultural y OFUNAM

Audio: 04 OFUNAM Temp1 Prog4 D050223

Ficha técnica
Descripción	Transmisión diferida de las temporadas de la Orquesta Filarmónica de la UNAM.
Invitados	Catherine Larsen-Maguire, directora huésped Nacida en Manchester y con residencia en Berlín, Catherine Larsen-Maguire estudió música en la Universidad de Cambridge y continuó su formación en la Real Academia de Música de Londres y la Academia Karajan de Berlín. Después de una carrera como fagotista principal en la Ópera Cómica de Berlín, a partir de 2012 centró su atención exclusivamente en la dirección orquestal, y desde entonces se ha convertido en una solicitada directora en Europa y América. Además del repertorio orquestal estándar, tiene un interés especial en la música contemporánea y ha dirigido varios estrenos mundiales.
Institución productora	Radio UNAM
Institución coproductora	Dirección General de Música de la UNAM
Género radiofónico	Musical
Resumen	Claude Debussy (Saint-Germain-en-Laye, 1862 - París, 1918) Preludio a la siesta de un fauno … no murmura agua alguna que no vierta mi flauta al otero rociado de acordes … L’après-midi d’un faune (1876) de Stéphane Mallarmé Aunque a menudo se le asocia al “impresionismo musical”, lo cierto es que Debussy tuvo una clara inclinación hacia la estética del simbolismo, que consideró al arte como una ventana hacia la ensoñación y el misterio. Fascinado por el poema L’après-midi d’un faune (1876) de Stéphane Mallarmé, Debussy creó el fantástico Preludio a la siesta de un fauno entre 1892 y 1894, una ensoñadora obra que abriría paso a una nueva época en la historia de la música. Los faunos, figuras míticas híbridas entre humanos y cabras, efectuaban adivinaciones a través del sonido de los bosques. Quizás por ello, esta obra en la que un fauno trata de asir un sueño donde “hasta el ocaso mira a trasluz” a dos hermosas ninfas, ha sido considerada una profecía de la música moderna, como si la música surgida luego de esta obra fuese “la sombra en que vuelve” ese sueño del que se despertó. En diciembre de 1894, Mallarmé presenció el estreno del Preludio a la siesta de un fauno bajo la dirección de Gustavo Doret y con el flautista George Barrère, quien más tarde estrenaría otra obra emblemática para flauta, Densité 21,5 de Edgar Varèse. A propósito, el poeta escribió a Debussy: “Salí del concierto muy emocionado: ¡es una maravilla! Su ilustración de L’après-midi d’un faune no presentó ninguna disonancia con mi texto, sino que va más allá, verdaderamente, en la nostalgia y en la luz, con inquietud, con riqueza. Estrecho sus manos con admiración, Debussy.” Germaine Tailleferre (Parc-de-Saint-Maur, 1892 - París, 1983) Pequeña suite Germaine Tailleferre fue la única mujer del grupo Les Six integrado también por Georges Auric, Louis Durey, Arthur Honegger, Darius Milhaud, Francis Poulenc y el poeta Jean Cocteau. Con el respaldo de Erik Satie desde 1917, este joven grupo compuso su música en contraposición a los estilos de su generación precedente, tanto de Debussy y Ravel como de César Franck. Sin embargo, “la Damme des six” mantuvo una estrecha relación con Ravel, así como con personajes como Charlie Chaplin, para quien musicalizó algunas de sus presentaciones en Nueva York alrededor de 1926, y el poeta Paul Valèry, con quien colaboró en su Cantata de Narciso (1937). Tailleferre escribió música de cámara, conciertos, música sinfónica, ballet, ópera y música para cine. Pequeña suite, escrita en 1957, es contemporánea a su ópera La Sirenita, donde utiliza por primera vez el dodecafonismo. Claude Debussy (Saint-Germain-en-Laye, 1862 - París, 1918) Jeux Luego del estreno en 1912 de la provocadora coreografía que Vaslav Nijinsky compuso para el Preludio a la siesta de un fauno de Claude Debussy por parte de los Ballets Rusos de Diaghilev, se le comisionó a Debussy la escritura de Jeux. La obra dejó atrás los tradicionales temas míticos representados en el ballet, y siguiendo las vanguardias estéticas de aquel tiempo, exaltó la tecnología de la modernidad, el juego y la juventud. El argumento de la obra, escrito por Nijinsky, dice así: En un parque, al anochecer, una pelota de tenis se extravía: un chico y dos chicas jóvenes se apresuran a buscarla. La luz artificial de las grandes farolas eléctricas que difunde un fantástico resplandor a su alrededor les da la idea de divertirse con juegos infantiles: se buscan, se pierden, se persiguen, se pelean, se enfadan sin motivo; la noche es cálida, el cielo está bañado por una luz suave, se abrazan, se besan. Pero el encanto infantil es interrumpido por una pelota de tenis, lanzada por alguna mano maliciosa. El trío de jóvenes, sorprendido y asustado, desaparece en las profundidades del parque nocturno. El estreno de Jeux se realizó en el Théâtre des Champs-Élysées dos semanas antes del ballet La consagración de la primavera de Ígor Stravinski, presentado por la misma compañía. Maurice Ravel (Ciboure, 1875 - París, 1937) Rapsodia española Maurice Ravel, quien solía decir que su madre “dormía cantando guajiras”, encontró en la música de España una fuente de inspiración para algunas de sus obras más emblemáticas. “Siempre he tenido predilección por las cosas españolas”, manifestó, “ya lo sabes, nací cerca de la frontera con España, y además hay otra razón: mis padres se conocieron en Madrid.” Así lo hizo en la Rapsodia española (1907), suite integrada por diversas danzas populares ibéricas. La Rapsodia inicia con el Prelude à la nuit, que con su reiteración del motivo de cuatro notas pareciese adentrarnos a la ensoñación. Sigue la Malagueña y la Habanera, que es en realidad una pieza que Ravel escribió en 1895 originalmente para piano. La Feria, que retoma el ritmo de una jota, evoca el ánimo de la fiesta de toros. Maurice Ravel (Ciboure, 1875 - París, 1937) Bolero De acuerdo a su amigo, el compositor Gustave Samazeuilh, a Ravel se le ocurrió la melodía del Bolero una mañana mientras tocaba el piano con un solo dedo. Emocionado por ello le comentó a su amigo: “¿No crees que este tema tiene una calidad insistente? Voy a intentar repetirlo varias veces sin ningún desarrollo, aumentando gradualmente la orquesta lo mejor que pueda.” Fue así la génesis del Bolero de Ravel, escrito para la compañía de Ida Rubinstein en 1928. Si bien el Bolero tiene un ritmo persistente deliberadamente dotado de un carácter español y similar al que se encuentra en la música de baile española del mismo nombre, Ravel señaló que la obra no estaba cerca del bolero tradicional y manifestó no haber tenido ninguna intención pintoresca. El Bolero es una obra que explora la estasis musical a partir de la reiteración de un material temático que se repite incesante sin variación ni desarrollo a lo largo de toda la obra, en palabras del compositor, “una pieza que duraba diecisiete minutos y que consistía enteramente en ‘tejido orquestal sin música’ y un largo crescendo progresivo.” Quizá por ello, Ravel escribió en una carta tardía: “Sólo he hecho una obra maestra, el Bolero; por desgracia, esta obra está vacía de música.”
Producción	Arturo Flores
Contenido	Claude Debussy (1862-1918) Preludio a la siesta de un fauno Duración aproximada: 10 minutos Germaine Tailleferre (1892-1983) Pequeña suite I. Prélude II. Sicilenne III. Les filles de la Rochelle Duración aproximada: 8 minutos Claude Debussy (1862-1918) Jeux Duración aproximada: 17 minutos Intermedio Maurice Ravel (1875-1937) Rapsodia española I. Prélude à la nuit II. Malagueña III. Habanera IV. Feria Duración aproximada: 16 minutos Maurice Ravel (1875-1937) Bolero Duración aproximada: 13 minutos
Conductores	Julia Santibáñez
Duración	01:37:40